Huasteca Global News - 29 de febrero de 2024
En un hito histórico para el mercado laboral mexicano, el porcentaje de trabajadores asalariados ha alcanzado su nivel más alto, registrando un 66.1% del total de la población ocupada al cierre de 2023, según datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE). Este avance, marcando el porcentaje más elevado desde el inicio de la encuesta en 2005, refleja una significativa mejora en las condiciones laborales y acceso a prestaciones de ley para la mayoría de los trabajadores.
La directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base, Gabriela Siller, destaca que este crecimiento en el empleo asalariado, que no distingue entre formal e informal, es un indicativo de un mayor número de personas uniéndose a unidades económicas establecidas, lo cual es un símbolo de progreso económico para el país. La mejora se atribuye a un fortalecimiento del trabajo subordinado, con un incremento de 1.2 millones de personas en este sector, contrastando con un modesto aporte de 40,000 personas por parte del trabajo por cuenta propia y los empleados sin remuneración.
Por otro lado, la tasa de desempleo ha disminuido a 2.7% en el último trimestre de 2023, lo que representa una caída anual de 0.3 puntos porcentuales. Este descenso va de la mano con una notable mejora en las condiciones laborales para quienes se han integrado recientemente al mercado laboral, con un 85% consiguiendo empleo con acceso a prestaciones mínimas de ley.
Simultáneamente, el mercado laboral mexicano ha experimentado una reducción en la tasa de informalidad, llegando a 54.8% al cierre de 2023, la cifra más baja registrada por la ENOE para un trimestre, excluyendo el período de la pandemia. Este descenso es significativo ya que el 64% del empleo creado en el último año se concentró en el sector formal, principalmente en servicios y actividades industriales.
Este panorama laboral refleja un mercado laboral resiliente y en evolución, aunque los expertos señalan la necesidad de adaptarse a los cambios mediante el desarrollo de nuevas habilidades. Con estas tendencias positivas, se espera que el empleo asalariado continúe siendo un motor de crecimiento económico para México, aprovechando oportunidades como el nearshoring para impulsar aún más el empleo formal en el país.
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